Un repaso por algunos comerciantes de la zona de Sierras Chicas arrojó una semblanza sobre el humor de los comerciantes respecto de la realidad actual de las ventas. Con un dejó un panorama mayoritariamente de estancamiento, algunos sin embargo prefieren darle una mirada más positiva.
«En el rubro comida hay días buenos y días flojos», dijo el dueño de una venta de pollo a las brasas en Río Ceballos. En coincidencia en el rubro ferretería (clave por la cantidad de industrías ue refleja), el panorama no es bueno: «Nosotros empezando hace 3 meses, y nos está costando mucho», dijo un ferretero de la zona.
«En mi caso, las ventas son muy pocas en lo que va del año. Conseguí vender pero fuera de la Provincia de Córdoba», explicó Adriana, vitralista de Villa Los Altos.
Volviendo al rubro gastronomía, las cosas no parecen ir mejor: «Difícil, nosotros bajamos el 40% sumamos servicios para que no decaiga, de todas maneras, somos optimistas en la recuperación económica, más allá de la capacidad dirigencial provincia y Nacional, por el derrame natural del asalariado, sin estar en temporada pensando recuperar el 25% de ventas», explicó el dueño de Todo Rico Pizzería.
«A lo que va del año 2017 las ventas van muy bajas, no llaman ni para consultar. Todo está flojo, muy flojo», explicó Carolina, que realiza fiestas infantiles.
Con balance positivo
El ejemplo contrario parece ser una óptica de Unquillo: «En mi caso este año es mejor que el año anterior. Me parece que la economía sigue igual. Los lentes no son un producto que se renueve día a día o mes a mes. Con suerte la gente cambia sus cristales una vez al año conservando su marco. Este mes, que años anteriores siempre es el mas bajo, arrancó con todo. Así que calculo que va a ser un buen mes. Para ser una óptica que ya hay 2 más y estar en Unquillo que es un pueblo difícil, el balance es bueno, sé que va a ser un buen año».
Otra experiencia positiva la vemos en la prestación de servicios, como lo es un centro de estética, una de las referentes de la región comentó: «Nuestra experiencia fue que en los meses de marzo y abril bajo muchísimo y luego repuntó mucho, mucho. Y eso pese a que la estética comienza a preocupar a las mujeres cunado llega el calor».