Naditas de las acequias, por Martín Ávalos

Mientras esperamos las lluvias y transitamos con la compañía de acequias secas por
aquí en Villa Ani Mí, recordamos los versos de otrora, y que sirvan de rogativa por la
bendita agua.

Naditas en la acequia
Cómo me gustaría estar
en la acequia, en la agüita
ser esa nada vacía
entre el agua y la piedrita.

Y que el agua se lleve
todo el mal que me han hecho
y que el agua me traiga
toda la bendición de estos cerros.

Contacto: aynilibros@gmail.com

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