El 25 de Mayo pasado se produjo una muerte trágica en el complejo entramado social conocido como Marqués Anexo cuando Gonzalo Moyano fue a reclamar un electrodoméstico «no devuelto» (presuntamente robado) a la casa de Mariano Cabanillas, líder de una banda local, quien lo corrió dos cuadras disparando con el apoyo de su hijo, Julián Aguilar.
Cuando la pelea se agravó ambos grupos fueron a buscar armas y se inició una persecución que acabó con una de las bandas escondiéndose en una vivienda del sector, entonces comenzó una balacera donde una mujer, Stella Maris Barrera, de 54 años de edad murió de cuatro balazos mientras colgaba la ropa.
Moyano fue detenido estando gravemente herido y con sus piernas baleadas tras ser perseguido por Los Cabanillas y buscar refugió en casa de su novia, nieta de la fallecida e hija de Daniel Bazán, conocido como «el tucumano» (líder de la banda rival). La mujer se asomó y fue alcanzada por el fuego, aparentemente cruzado. Falleció casi en el acto.
Por eso han prometido venganza desde la familia a la cual pertenece la difunta, avisando que matarían a los hijos de la banda de los Cabanillas. Hasta el momento son cuatro los detenidos por el hecho. Ahora se teme una guerra entre el sector de Los Cabanillas contra el sector de «Los Tucumanos».
Según versiones, algunas familias están retirando a sus hijos del barrio por temor, con la particularidad de que las familias de la zona son muy extensas y de diversa composición, por lo que una muerte de esta índole afecta a todo el barrio.
La mesa de Gestión barrial se reunió hoy buscando mediar generando diálogo entre las partes, mientras algunos vecinos indicaban que la Policía «miraba para otro lado».