DiarioSierras.Com dialogó con Mabel Aramburo, vecina de la zona de Ñu Porá donde este fin de semana se produjeron nuevos desmontes pero esta vez con la identificación de los autores del hecho. Aramburo viene realizando denuncias desde el año 2000 y su vivienda es colindante con los terrenos que están siendo podados para construir en el lugar.
«Recién estuve arriba, en la calle Coronel Elías y llegó justo la Policía Ambiental, estuvimos hablando, sacaron fotos, les hice ver algunos de los desmontes que hicieron durante cuatro días de trabajo. Esto se frenó con todo el movimiento que hubo, después volvieron a ingresar y ahí justo yo subí y tuvimos la suerte de que no pudieron disparar porque antes en todas las ocasiones en que llamamos a la Policía y los inspectores de Ambiente ellos se dieron a la fuga. El sábado pasado el agente justo los encontró y no pudieron disparar, tomaron los datos de quienes eran y llegó una moto que veía seguido, diciendo que era el dueño, pero no tenía escritura, tenía un papelito de posesión que no sé quién da es información dentro del municipio».
Larga data
Los movimientos en la zona vienen desde hace tiempo y no solo de una gestión en particular, y como ocurre en muchas regiones de la Provincia, son tierras que quedan sin dueños y pasan a propiedad de los Estado municipales, para luego ver aparecer estos «poseedores»: «no sé si es Catastro provincial, municipal o de dónde. Esos lotes son de los años ’40 y yo vengo haciendo documentos desde el año 200 con la gente de la Agencia Córdoba Ambiente con la Legislatura de Córdoba en la Comisión de Ambiente donde se hizo un proyecto con la firma de cinco o seis legisladores y es un gran peligro para nosotros porque tenemos antecedentes cuando han abierto calles laterales con pérdidas muy graves y más arriba cuando han hecho un desmonte luego tuvimos problemas con el agua de lluvia. El 15F fue grave no sólo por el agua de río sino lo que bajaba de la montaña. La Policía Ambiental advierte que más allá hay carteles que dicen «se vende este lote», o sea que es una timba. Ahora dicen que el supuesto dueño tuvo que pagar una multa por el desmonte pero no le creo, para mi hay alguién detrás por la magnitud de los trabajos en tantos lotes. Tiene que tener mucha plata para ese emprendimiento y no me pareció que sea el chico de la moto. Eso ha quedado para la Municipalidad pese a que hemos pedido que lo junte con la Reserva Los Manantiales como resultado y patrimonio. Pero esto no es Tierras del Futuro donde hubiesen requerido testigos y otros documentos. Me dice alguién de Ambiente que han dado marcha atrás por el momento. Los vecinos nos hemos organizado y hemos presentado toda la documentación en el Concejo Deliberante y en la Legislatura provincial. Ahora estoy cerrando atrás porque esta misma gente se me quiso meter, así que doble problema».