Martín Caparrós: «La mejor manera de que se hable de algo es pedir que no se hable»

Martín Caparrós: la fuerza de lo silenciado.
Una de las cosas que nos dejará el CILE será sin duda la atmósfera de proximidad con las letras y con los escritores que por estos últimos días de apoderó de las calles en los diferentes espacios en donde se desarrollaron las actividades del VIII Congreso de la Lengua Española.
Una postal que pinta de forma completa esta atmósfera fue precisamente la de la inusual conferencia de prensa que el periodista Martín Caparrós concedió a cronistas locales sobre las escaleras de uno de los accesos al teatro Libertador San Martín, durante la jornada de clausura del día sábado.

Reclinado sobre las escalinatas, y con una taza de café sobre los peldaños de mármol, Caparrós repasó sus impresiones sobre algunos puntos del Congreso y revisó las connotaciones del discurso presidencial en la apertura. Al ser consultado sobre las críticas que recibiera el presidente Mauricio Macri, Caparrós hizo mención a uno de los fragmentos del discurso en el que el mandatario habló de la “primer”, en lugar de “primera” vuelta al mundo del hombre (y que le valiera el señalamiento de los medios por la incorrección gramatical), pero puso su mirada en un recorte propio sobre otro aspecto discursivo, él que refiere a lo que para Caparrós fuera un decisivo hecho civilizatorio en la historia de la humanidad pero sobre el cual Macri optara por destacar que “permitió abrir las rutas de las comunicaciones y el comercio”. Para el periodista argentino radicado en España, esta frase pinta de modo completo la ideología de quien hoy detenta el poder en nuestro país.

Al ser consultado por diariosierras sobre otra de las declaraciones del discurso presidencial vinculada con la mejora de los indicadores de los niveles educativos en el país, Caparrós comentó: “cuando lo escuché me dije: ¿qué tráfico habrán hecho con las formas de evaluación?, no tengo ninguna prueba de nada, pero sí me parece raro en un país en donde no se llega siquiera a los ciento ochenta días de clases al año”. Otra de las cuestiones en relación a la temática educativa sobré la que hizo mención, fue el crecimiento en todos lados de la oferta educativa privada en detrimento de la pública.
En referencia a los eventos que más llegada tuvieron a la gente fuera del ámbito academicista del Congreso, el periodista mencionó la presentación de Mempo Giardinelli, que convocó interés en el ámbito educativo de muchas personas que se sintieron representadas y la participación de Claudia Piñeiro.
Sobre los tópicos que colonizaron el CILE, apuntó entre lo más llamativo lo mucho que se habló del lenguaje inclusivo, cuando éste había sido deliberadamente excluido de la agenda oficial: “todo el mundo sabe que la mejor manera de que se hable de algo es pedir que no se hable, es intentar silenciarlo”, concluyó Caparrós.

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