Las Encuestas, otra herramienta de Propaganda en un año electoral

Es un año electoral y como tal el bombardeo informativo no tiene tiempo ni lugar, ni límite que respetar para llegar a un posible votante.
A las técnicas del Big Data habituales desde el 2008 a esta parte para difundir consignas, informaciones tendenciosas y datos vistos desde un punto de vista que convenga a tal o cual sector, se suman cada vez más las Encuestas como medio de propaganda.
Las elecciones del 28 de Julio en Río Ceballos no son la excepción a esta regla. A nuestro medio llegaron y también consultamos distintas encuestas desde los partidos que participan en la compulsa electoral, pero al cotejarlas, los resultados son totalmente dispares entre sí.
Cada partido da a su candidato a intendente al menos entre los dos primeros y posterga al resto de los siete contendientes en escalas graduales. En lo único en que coinciden es en que el comicio tendrá una intención de voto orientada hacia tres candidatos (cuatro según otra fuente, que ubica a su candidato en la pelea). ¿Cómo pueden ser verdaderos todos estos estudios con tanta diferencia entre uno y otro?
Vamos a analizar algunos tips a la hora de leer encuestas, lo que en un año donde aún restan varios comicios por delante, puede ser de utilidad.
Por empezar en toda encuesta lo primero que llama la atención por ser visualmente atractivas, son las gráficas que nos dan una idea de quien va primero, segundo, etc. Pocas personas reparan en un cuadrito, a menudo ubicado al final de la Encuesta que se titula por lo general «Ficha Técnica».
En dicha Ficha Técnica está lo que en realidad nos da la Confiabilidad del trabajo. Dentro de los ítems de esa Ficha uno puede leer sobre el tamaño de la muestra y cómo fue recogida. Por ejemplo, algunos de los trabajos acercados a este medio respecto de la Elección a Intendente para Río Ceballos hablan de un muestreo elaborado telefónicamente.
Desde el vamos ese tipo de muestreo causa dificultad, dado que muchas personas optan por no responder o cortar el teléfono, impidiendo al encuestador acceder a su opinión personal. Por ende la muestra se queda con datos de las personas que sí se interesaron en responder. Se considera más difícil que un encuestado rechace a un encuestador cara a cara que por teléfono, por lo que se prefieren las encuestas personales y mejor aún si son casa por casa. Las realizadas vía telefónica o por internet entran en lo que se denomina «muestreo accidental», donde por lo general responde quien quiere responder, limitando la capacidad de que esos datos se puedan trasladar al global.
Otro elemento a tener en cuenta es el amaño de la muestra, con la lógica de que a mayor tamaño, mayor Confiabilidad. Los estudios acercados rondan los 400 casos consultados, lo que limita su capacidad.
Finalmente y para no hacerla larga, dentro de la Ficha Técnica aparece el indicador de «Confianza» del trabajo. Entre los trabajos acercados, la mayoría estaban por encima del 5,5%. Esto significa que el resultado puede variar 5,5% hacia arriba o hacia abajo de los números dados, cuando el límite para considerar como óptima a una encuesta el el 5%.
En lo que todos los trabajos conocidos en Río Ceballos coinciden es en que los tres que disputarán la punta están a una distancia de entre 2 y 4 puntos porcentuales, lo que teniendo en cuenta el indicador de confianza del 5,5%, no nos arroja muchas seguridades. Tambien hay coincidencias en que los candidatos principales no superan el 30% de la intención de voto, aunque puede modificarse a medida que se acerque el 28 de Julio y los ciudadanos de la ciudad se enfrenten al único encuestador certero: las urnas.
Queda claro que las encuestas han sido percibidas por los publicistas para amilanar al contendiente y desalentarlo a luchar por «propagar» sus ideas, del mismo modo que puede motivar a las propias filas en ese sentido. En ese contexto, si alguién necesita decir que va puntero…