(ANSA) – NIZHNI NOVGOROD, 20 JUN – Argentina debe revertir mañana frente a Croacia la pálida imagen que dejó en el estreno frente a Islandia si quiere que el de Rusia termine siendo el Mundial de Lionel Messi, como él mismo y tantos otros aspiran.
«Messi es un prócer para Argentina como lo fue Diego Maradona en su momento», resumió hoy Jorge Sampaoli, DT del combinado «albiceleste» que cambiará nombres y sistema buscando un triunfo impostergable para soñar con el pasaje a octavos de final.
Aún cuando Argentina no llegó como favorita a esta Copa del Mundo, se esperaba más de ella ante un rival como Islandia, que disputa su primer Mundial de la historia y desnudó sus falencias.
Como si algo faltase, Messi malogró un penal mientras Cristiano Ronaldo marcaba un triplete frente a España en un empate con sabor a gloria y hoy sumó otro ante Marruecos, el primer eliminado del torneo pese a sufrir apenas dos goles.
Luego se sumaron Egipto y Arabia Saudita, que repitieron derrotas en el Grupo A que ya clasificó a octavos de final en forma anticipada a la anfitriona y sorprendente Rusia y a Uruguay, rivales en el cierre de la fase de grupos. La «Celeste» avanzó con apenas dos goles también y fue la única selección sudamericana ganadora en el estreno, pues así como Argentina, el Brasil de Tite y Neymar empató con Suiza, Perú perdió con Dinamarca y Colombia frente a Japón. A pesar del punto cosechado, la situación de Argentina es incómoda porque chocará con una Croacia que debutó con triunfo por 2-0 frente a Nigeria, rival de Islandia el viernes y de la «albiceleste» en la última jornada.
La situación apremiante y algunas actuaciones por debajo de lo esperado llevaron a Sampaoli a ensayar variantes y a arriesgar frente a Croacia, buscando el sistema que mejor se adapte a su gran figura.
«Cuando no ganamos, cargamos toda la responsabilidad sobre él», destacó el DT al referirse a la presión que soporta el astro del Barcelona, pilar de un equipo que el propio Sampaoli definió alguna vez como «el equipo de Messi».
Por ahora y sea quien fuese el conductor real del plantel, Argentina sigue en deuda y los ánimos no parecen ser los mejores por una u otra razón y, según confiesa Sampaoli, eso afecta aún más su rendimiento.
«Lo que sucede afuera de la cancha genera incomodidad y hacia adentro se traduce en una merma de rendimiento», reconoció el entrenador, concepto avalado por alguien que lo ve desde afuera, pero lo vive desde adentro. «Sufrimos mucho las críticas que recibe Leo y cuando dicen que no siente la camiseta de la selección nos duelo porque no es cierto. Si lo vieran llorar y sufrir como lo vimos nosotros…», afirmó Celia María Cuccittini, la madre de Messi.
«Daría cualquier cosa porque este sea su Mundial porque está ilusionado y es lo que más anhela», confesó la mamá del astro entrevistada por un programa de su país y al explicar cómo vive su hijo esas frustraciones.
Pese a todo, Celia destacó que así como hay quienes siguen cuestionando a su hijo, hay «mucha gente que lo quiere y se lo transmite y él eso lo valora muchísimo», razón como para confiar en que ese respaldo lo ayude a recuperarse anímicamente.
Idénticos conceptos expresaron las madres de otros referentes del combinado nacional -algunas de ellas entre lágrimas- en el mismo programa y al reconocer que sus hijos quieren cerrar la herida por la final perdida en Brasil hace cuatro años.
Para que eso suceda, Argentina primero debe vencer a Croacia, un rival que «merecía algún cambio táctico porque tiene otras variantes a la hora de atacar respecto de Islandia», explicó Sampaoli en la conferencia de prensa previa.
«El cambio de nombres tiene que ver con el cambio de sistema, que buscamos nos dé la flexibilidad y la posibilidad de sorprender a un equipo que va a estar muy tranquilo», reconoció.
Argentina defenderá con tres hombres en el fondo y dos laterales que podrían sumarse tanto a esa función, como a la tarea ofensiva, rubro en el que Messi estará acompañado una vez más por Sergio Agüero, autor del gol en el estreno.
Afuera, en cambio, Angel Di María, que dejará su lugar a Cristian Pavón, veloz delantero de Boca Juniors que «tiene un enorme potencial y es capaz de romper un partido», comentó Sampaoli, anticipando así su titularidad, pero sin confirmarla.
Sobre Messi, el DT recordó que «Argentina con él perdió apenas cuatro o cinco partidos y cuando marca un gol, lo gritamos todos y nos sentimos parte, pero cuando no ganamos, le cargamos toda la responsabilidad».
A diferencia de algunos aficionados argentinos, los rivales expresan gran respeto por Messi: «No hay nada que agregar de él que no se sepa. Es el mejor jugador del mundo y anularlo es prácticamente imposible», según Ivan Rakitic.
«Por eso no tengo nada que aconsejarle a mi entrenador (Zlatko Dalic, Ndr) en ese sentido», completó el volante croata que es compañero de Messi en Barcelona y quien trabajó como «asistente» del DT en la previa de este partido.
«Por algunos días lo tuve como colaborador y estudiamos juntos la mejor manera de frenar a Messi. Me gusta conversar y escuchar la opinión de mis dirigidos», afirmó Dalic, que también consultó a Luka Modric, rival del argentino con Real Madrid.
Dalic anticipó que también contempla un par de modificaciones en su plantel respecto del que derrotó 2-0 a Nigeria y demostró que no le tiembla el pulso cuando desafectó a Nikola Kalinic por negarse a ingresar en ese partido aduciendo una dolencia.
«Debemos dejar de lado nuestros egos cuando representamos a nuestro país», explicó el también «merengue» Mateo Kovacic, al recordar que el fútbol es un deporte colectivo aún cuando algunos tengan la suerte de contar con jugadores como Messi.(ANSA).
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